domingo, 22 de noviembre de 2009

Semana de poros abiertos



Este finde ha estado muy bien también. Me está gustando que los disfruto mucho.

Estoy disfrutando de buena compañía y estoy cambiando de aires.
Desde el viernes estoy fuera con gente de siempre y otra nueva en sitios distintos y distintas maneras de hacer y pensar las cosas. No es, en realidad, todo tan diferente porque se asemejan mucho a mí en cuanto a todo esto y es lo que estos últimos meses venía echando de menos. Otra vez he sentido que no me importa la distancia con mis amigos de La Herradura, y cuando he reconocido a una gran amiga (a la que contaba ya 2 años sin ver)de espaldas por su voz y planta , me he quedado sin palabras. ¡Lo mejor fue su cara! y ver cómo me miraba de arriba abajo intentando relacionar el recuerdo que tenía de mi, me ha hecho mucha gracia porque en su tiempo fue muy especial y por circunstancias, se fue de allí.
Por otro lado, echaba de menos a mis niñas con las que paso todos los días en verano, y todo lo especial que nos rodea: Emma, Patri y Rosa, las más especiales. Y entrar a un sitio al que no vas desde hace tres meses y te pongan la copa como quieres, y criticar a las tontas y tontos de turno, y dormir la resaquilla en la arena que casi tiene mi huella por ahí enterrada, y al sol sin apenas ruído,ni prisas, ni nada que disturbe la tranquilidad.

Aire, agua y sal al abrir la puerta del coche tras dos horas de viaje. O ese mismo olor que se conserva dentro del piso esperando que se le deje salir por alguno de los 5 de mi familia. Porque cada vez que entro, vuelvo a inspeccionar el piso de arriba a abajo como cuando era pequeña. Y sigue encantándome mirar en los cajones, armarios y demás cosas del piso, por muy vacío que esté.

Ojalá la gente entendiera porqué a veces ansío mi espacio de 2 meses en La Herradura. Creo que soy muy afortunada teniendo desde siempre una segunda casa en primera línea de playa y las mismas personitas de las que apenas se nada en un año y en 5 minutos pillo el hilo.

Termino así mi fin de semana, con la sonrisa colgada y con mis correspondientes ganas de recibir a los que se han ido por pocos días de viaje.

Y en cuanto a mi autosuficiencia a la hora de cualquier cosa...diré que cada día me caigo mejor (jaaaaaaaaaaaaaaa!:)).

*No pienso cargarme el post con lo negativo de la semana porque yo también tengo memoria selectiva y no me gustaría que por nada se chafara esto.
**Ni voy a buscar los fallos estilográficos de este porque si los revisara, seguro que después no lo leería igual, porque ya me pararía demasiado en dejar que la cabezota se metiera de por medio.

Firmado: Mimi, la espiritual :)

lunes, 16 de noviembre de 2009

Espacio

Creo que le estoy pillando el truquillo a esto de ser independiente.

Estoy notando que ya voy necesitando menos, porque creo que me lo propuse firmemente y...están saliendo bien las cosas. Como me dijeron ayer y en algunas otras ocasiones, en la distancia también se puede demostrar lo que hay, y muchas veces no hay ni que hablar todos los días, ni estar encima de nadie dando abrigo. Hay que estar para cuando hay que estar. Y creo que eso es más valioso que estar todos los días con alguien para que te haga compañía.

Todo el mundo necesita su espacio relativo, y ahora estoy disfrutando del que me deja la gente que me importa/aporta (y de los 'new incomings'). Aquí o allí.

**y a tí, Kaka seca, qué te voy a decir a tí :)



domingo, 8 de noviembre de 2009

sonrisas de por medio


Esos días en los que te cuelgas la sonrisita desde temprano son únicos.

Empiezas flojito y, conforme pasan las horas, se amplian hasta que llega un punto en el que se resiente la barriga de tantas sonrisas. Le sigue un ritmo de altibajos. Puede que, conforme se va acabando el día, disminuyan en forma pero no en contenido. Si por alguna razón disminuyeran en los dos a la vez, no hay que preocuparse. Están ahí de reserva para recurrir a ellas.

Como en la vida, las sonrisas suben y bajan, llenan y hasta pueden hacer que rebosen. Sin embargo, no voy a dejar aparte las que he esbozado ayer y hoy, porque me han supuesto mucho porque se ha currado en ellas mucho.
Además, han rebotado de canto en otras caras. Y esa sensación la voy a guardar en aquel sitio donde es difícil ubicar los buenos sentimientos, ¡vete a saber!
Termino mi día con la boca cerrada [que no menos significante].

Caerse está permitido. Levantarse es obligatorio [como dirían algunos].

*Esto es solo el principio.


jueves, 5 de noviembre de 2009

Viejunos (2ªparte)


En el banco...

"Ay que ver, con lo que eras tú ¡y en lo que has quedado!"- reflexiona una mujer de unos 50 años.
"Verdad- responde la mujer,de unos 70 años, asintiendo mientras mira para el suelo- pero,bueno...es que yo también tengo mi edad, ¿eh?".

No veas la gente, tan pronto te regalan un super alago que te dan una buena patada.
Cada vez más me lo paso mejor con la gente mayor, y es que...para muchos de ellos, el pasado siempre es mejor y más sano y el presente es corrupción. Discutible todo.